Sabores de otoño.

Ese olor que invade toda la casa me gusta, una mezcla del ajo cuando se fríe con los hongos. El olor del ajo es un recuerdo de mi niñez y de los deliciosos camarones que mi mami sabía preparar con ajo y salsa china. Después ese olor se me viene a la mente de cuando mi mamá de intercambio preparaba comida y sazonaba y sigue sazonando con ajo, la cebolla nunca le hizo bien a su estómago por lo que no entraba ni en cuestión. Y como he disfrutado de la comida hecha por ella. Es mas la masa de este pay es de una receta de ella. Su receta no llevaba hongos, pero llevaba queso mozzarella, albahaca fresca, tomates secos y tomates frescos entre otras cosas y también es una delicia total para el paladar.

En este pay el ingrediente principal son los hongos, setas o champiñones  . Para mi las setas  pertenecen a esa clasificación de me gusta el 100% o no te gusta para nada, al igual que por ejemplo las aceitunas, o te gusta o no y no hay términos medios.

Pay de  

Los hongos siempre me gustaron, pero claro en la mitad del mundo Ecuador y en ese entonces, solo había los champiñones, que son cultivados, acá en el norte del planeta es donde he conocido la gran variedad que hay y como muchas otras cosas naturales son las que aprendes y vas tu mismo a cosechar en los bosques. 

Reconocer las setas es una arte, por así decirlo y requiere de mucha observación. Eso he aprendido con mi suegra. Empezamos ya hace muchos otoños los paseos al bosque en busca de las setas o en el mismo terreno de la casa de campo sin irnos más lejos. Actualmente mis hijos también se van con nosotros, pero eso requiere llevar algo para comer y hacer un picnic y se convierte en un paseo que a la final es lo mas lindo de ir a cosechar setas. A ellos les encanta cosechar y encontrar las setas, pero comer, eso ya no, claro es un sabor fuerte, quizá de adultos les guste o si no, no.

Este pay es la mezcla de setas boletos como encontré en el diccionario, este nombre lo aprendí directo en finlandés (herkkutati)

así que no lo he aprendido directo en español con el ajo y claro con leche algo también tan de aquí aunque leche hay en todos lados, pero la variedad de productos lácteos en Finlandia es increíble.

La receta:

Para la masa:
-  4 decilitros de harina de trigo
- 125 gramos de margarina
- 3 cucharadas de agua fría

El relleno

- 2 ó 3 dl de setas u hongos
-  1 ó 2 dientes de ajo de acuerdo al gusto
-  una pizca salsa de soya.
-  2 y 1/2 decilitros de crema de leche o leche
- 3 huevos
- pimienta al gusto
- una pizca de sal
- 150 gramos de queso Emmental

Preparación:

En un tazón colocar la harina e ir mezclando con la mantequilla suave y previamente derretida, en mi caso uso margarina líquida, finalmente aumentar las cucharadas de agua fría. Hacer una bola de la masa, ponerle en una funda plástica y a la refrigeradora por mínimo de 30 minutos. Precalentar el horno a 200 grados centígrados.

En un sartén freír los hongos o champiñones y aumentar el ajo machacado, chequeando que no se queme el ajo pero si que le de sabor a los champiñones, aumentar la sal, la pimienta y después de un momento la salsa de soya.

Aparte mezclar los huevos con la leche o crema de leche y el queso Emmental , que es el que a pesar de tener un sabor fuerte hace resaltar el sabor de los champiñones.
 
A continuación sacamos la masa de la refrigeradora la extendemos haciendo un circulo y ponemos sobre el molde. Aumentamos los hongos freídos y encima vertemos la mezcla de huevo, con el queso y la leche.

Ahora le metemos al pay la parte más baja del horno por 40 minutos y a 200 grados centígrados. Recuerden chequearle de vez en cuando.

Servido con una ensalada de rúcula o una ensalada verde queda riquísimo. Y buen provecho.

Pancake de espinaca al horno

Je je, hizo efecto, lo mejor de cuando uno cocina es que los comensales pidan más y más. Viniendo de un par de críticos caseros que dicen, no me gusta a muchas cosas nuevas que prueban, esta vez admito que todo salió de maravilla, aunque con mis experimentos siempre hay la posibilidad de que no salga.
Esta receta es una mezcla de dos recetas y de la intuición de que me iba a salir bien o que tenía que tener un plan b de otra comida para ofrecer a mis comensales, por suerte no hizo falta el plan b y de paso hice propaganda de lo fuerte que es Popeye, je je.

Aquí va le receta:

7 decilitros de leche
3 y 1/2 decilitros de harina de trigo
3 huevos
1 cucharadita de sal (menos también)
1 cucharadita de polvo de hornear
20 gramos de margarina derretida.
100 gramos de espinaca fresca, puesta a hervir y después de eso cortada


En un bol poner los huevos, aumentar la leche, la harina, la margarina derretida, la sal y el polvo de hornear mezclar bien a mano. Dejar reposar por unos 20 minutos en un lugar cálido en la casa. Mientras tanto es bueno precalentar el horno a 225 grados centígrados.
Aumentar la espinaca  y mezclar. Verter en el molde del horno al que previamente le hemos puesto el papel encerado.

Poner a hornear en casi la parte mas baja del horno por 25 a 30 minutos, depende del horno.
Listo y a servirlo al estilo finlandés con mermelada de arándanos rojos:) O sin, como a uno le guste.

Is all about layers!

Cuando afuera tienes -21 grados centígrados, sabes bien que estas ya cerca del Polo. Si recién hubiese llegado a esta parte del planeta con esa temperatura afuera: para nada quisiera salir. Pero estos años de experiencia con el frío de algo me han servido.
El día lleno de luz y despejado me dice ven ven y el tener hijos varones, influye también en la decisión, si se estuviese todo el día dentro de casa, ya se imaginarían como los decibeles de sonido subiesen ha ciertas horas de la tarde y como la energía se encerrase dentro de casa. Así que: como estos niños tienen sus raíces nórdicas están dispuestos a salir. Es más el uno pide y pide, si lo ven desde el punto de vista de un niño la nieve y esa suave que cae cuando hace -grados es simplemente un gusto de invierno para jugar. Darse las vueltas acostado sobre ello y disfrutar de las cosas que nos brinda la naturaleza es un simple gusto que los pequeños de la casa saben disfrutar.

      El mar Báltico empezando a congelarse.



Ahora bien la salida es plan propio. Hay es cuando la planificación y la experiencia de vivir en un país frío entran en juego y por supuesto todos los consejos que has recibido de la gente nativa de aquí. Se trata también de moverse, cuando se está afuera hay que moverse,  ya que como cosa común quiere decir: energía, energía que calienta el cuerpo. Y si sabiéndose vestir se puede estirar el tiempo de estar en ese frío al que hasta la congeladora le queda pequeño.

Las capas. Eso realmente es lo esencial.
No lavarse la cara antes de salir. Si sales en la mañana y claro si no sales a trabajar. Si aunque suena raro la grasa que nuestra piel expande es la capa que nos protege del frío.
!Nos protege¡ Imagínense lavársela y salir, si el agua se congela y nos hemos puesto agua en la cara o líquidos de limpieza que incluyen eso. Seguro sienten el frío aún más fuertemente. Hablo por experiencia.

Pero regresando al tema de las capas de vestimenta. Aquí va la primera, la que va con la piel y que debe ser a la piel, debe se de un material natural y caliente o que mantenga el calor. Mangas largas y pantalones tipo leggings la segunda capa un saco de lana, según yo si no es muy grueso es más cómodo y por ejemplo los de alpaca son el éxito. ¿ Otro pantalón ? Quizá para los niños, otro térmico como los de los leggings, ellos se revuelven en la nieve. De hay pantalones de esquí y una chompa o chaqueta de plumón preferiblemente. Los niños usan los prácticos mamelucos, que mantienen mas abrigado al cuerpo. Todo bien cerrado. De hay van, los que evitan que entre el frío al cuerpo y son: guantes, bufanda y un gorro bien caliente.
Con el frío como el de hoy ponerse dobles guantes es mejor. Otro punto de vista a tomar es que los que no separan los dedos son más abrigados pues los dedos entre sí emergen calor.
Taparse las orejas es fundamental. Es piel delgada. Protegerse el cuello con la bufanda. Amarrarse bien los zapatos, bajarse las bastas sobre los zapatos. El cabello para nada mojado si no, se nos congela. Eso es cuestión de pocos minutos con tantos grados de frío. Y bueno así es como se puede sobrevivir al frío nórdico y también disfrutar de ese aire tan fresco, porque ya más fresco que eso, !no sé cómo! Y como los finlandeses lo llaman salir a tomar un salto de oxígeno.